Pintails

Salgamos de la nave, empecemos a reencontrarnos con las sensaciones abandonadas... ¿Acaso has olvidado como el sol encandila en un amanecer?
¿El placer de sentir la frescura de una brisa y el sonido de las hojas moverse por doquier?
Con la piel de gallina me atrevo a preguntarte...

¿LO HAS OLVIDADO?

Subir la vista hacia el cielo, ver la copa de los árboles meserse sobre sí mismos, tanta serenidad encuentro, tanto que al pasar de los dulces vientos del anochecer siento escalofríos por todo mi cuerpo...

Cuánta serenidad, cuanta tranquilidad y satisfacción.

El solo hecho de observar a las personas, uno se da cuenta de lo alejada que esta, del olvido a la satisfacción de caminar descalzos sobre el suave pasto de primavera.

Cada día determino más profundamente como una persona puede tapar tantos sentidos y ocultar tantas afecciones, sé q a veces es mejor dar la vuelta y seguir la vida cotidiana que nos apresura... pero... si se toma un respiro para apreciar nuestro entorno? El sólo hecho de no ser un esclavo del tiempo hace que uno tenga más libertad y pueda empezar a fijarse en aquello que estuvo siempre, aquello que en todo momento es esencial y a la vez decora al planeta... Empecemos a vivir y a dejar de tomarnos las cosas tan a la pesada, dejar la codicia de lado y ser una gran y generosa persona, para poder ser respetado y también para poder respetar...

Hagamos de esta vida algo inolvidable...

Longboard... WAIT!

Cuando menos lo esperes el amor te encontrará, va a ser una gran amiga sin que te des cuenta, no estés triste, sé que lo estarás...

Me dijo Daniel.

¿Será verdad?
Si en esta vida pasajera se encuentran almas desorbitadas que por el azar encontramos, descubrimos y con ansias de encontrar una que valga la pena conservar.

¿Conservar?
Para qué!? Si después del mar de ilusiones llega la gran ola de la derrota. Así como de las malas salen buenas, pienso que también es viceversa...
De las buenas salen... PÉSIMAS!
¡LA MENTIRA!
¡INFIDELIDAD!
¡TRISTEZA!
Infelicidad...
Sentir el cuerpo sin el alma, habiendo tomado un riesgo, uno finalmente pierde. Como una vez en el maldito pasado. Es la primera vez en mi vida que siento MIEDO a volver a sentir ese gusto a mierda, que la garganta se enrieda con la lengua y los párpados claman por tapar los ojos y cada noche se convierte en un infierno de pensamientos tirados a la ruleta, para después despertar y seguir apostando al azar dominante de cada día...

Lonely...

A pesar de todo, mi corazón sigue latiendo y algún día voy a tener que arriesgar mis sentimientos sea para bien o para mal.
No voy a morir esperando...

Yo...